SITUACIÓN


Forma parte del conjunto de los pueblos blancos de la zona de la Axarquía. Macharaviaya dista 27 Km de Málaga y 25 Km de Vélez, y está situado sobre un conjunto de colinas en forma de anfiteatro. Su altura máxima es el Cerro de la Capellanía (481m). El núcleo urbano se encuentra a 235 m sobre el nivel del mar. Recibe las aguas del arroyo Ibero, que nace en la pedanía de Vallejo y pasa por Benaque para desembocar en Cajiz.
Visitar Macharaviaya es como hacer un viaje en el tiempo y retroceder al siglo XVIII, ya que su fisonomía apenas ha cambiado desde entonces, cuando alcanzó su madurez urbana.

HISTORIA
 
Es cuestionable su origen árabe, "Machar Ibn Yahha", que significa cortijo del hijo de Yahha. El establecimiento del núcleo puso haber sido anterior a la llegada de los mahometanos, pues según consta en el archivo municipal, un crucifijo antiquísimo estuvo conservado 700 años durante la invasión musulmana en una cueva llamada de la Hiedra.
La fundación del pueblo data de 1572. La iglesia parroquial, sin embargo, fue edificada en 1505 y puesta bajo la advocación de San Jacinto, que más tarde será reconstruida con la financiación de la familia Gálvez.
Durante el siglo XVII, Macharaviaya lleva una vida próspera basada en la economía del cultivo de la vid. Un siglo después, José de Gálvez se lanza a la aventura americana. Por otro lado, Bernardo de Gálvez fue nombrado marqués de la Sonora, virrey de las Indias. Esto supuso un importante empuje para la economía de la villa.
La huella de la familia Gálvez, cuya influencia dio origen a que a Macharaviaya se la conociera como el pequeño Madrid, se reflejó en la reconstrucción de la iglesia, el impulso a la agricultura y en la instalación de la Fábrica de Naipes, que poseía el monopolio de este producto para su venta en América. El edificio de la antigua fábrica está hoy habilitado para uso residencial.
 
          MACHARAVIAYA-BENAQUE: INSPIRACIÓN ARTÍSTICA
 
El pueblo tomaría en adopción a Ángeles Rubio Argüelles, condesa de Berlanga, con su corral de comedias, el pintor norteamericano Robert Harvey y otros artistas como Buly, la ceramista Sonia Tena, y quién no recuerda al gran organista Christian Baude en sus conciertos de clavecín en la iglesia de Benaque, acompañada del tenor alemán Hans Diter Bader.
Andar por las calles de Macharaviaya-Benaque es como disfrutar de ricos versos de almendro en flor, es como escuchar el silencio bajo el olor a jazmín. Es el maravilloso juego del blanco de cal, a la caída de la tarde mientras Salvador rueda recita sus poemas a su tierra natal. A veces se oyen verdiales en su entorno.
 
                                                 MONUMENTOS
 
Además de un recorrido por el bonito pueblo de calles escalonadas, Macharaviaya tiene a la entrada del pueblo un templete erigido a finales del siglo XVII, en memoria de la familia Gálvez y sus donaciones. Pero el edificio más destacado en la Iglesia de San Jacinto, reconstruida en 1783.
Por último, el Parque de la Luisiana de reciente construcción. Se construyó como homenaje a los 82 malagueños pertenecientes a la comarca de la Axarquía que partieron del puerto de Málaga el 1 de junio de 1778 y fundaron junto a D. Bernardo Gálvez las ciudades de Nueva Iberia, Barataria y Tierra de Bueyes.